27 de noviembre
-1915/1985/2015- -100/30/15-
El día de hoy “la Facultad” (nuestra Facultad) cierra el ciclo de sus primeros cien años. En este año de 2015 se celebran los 100 años de su ley de creación, y también los 30 años del retorno a la democracia y la reinstitucionalización de la Universidad.
Hace 30 años, además, un grupo heterogéneo de entusiastas, provenientes del exilio, de las experiencias de la dictadura y de generaciones diferentes, fuimos convocados por “el Flaco” José Luis Parodi, para conformar una nueva propuesta de Taller de Arquitectura en la Facultad.
Hace treinta años inicié mi actividad docente, que nunca interrumpí.
En aquella experiencia nos sumamos compañeros y compañeras que nos conocíamos de mucho atrás y otros que aprendimos a querernos y a conocernos, y también a discutir, mucho, sobre qué hacer con la enseñanza de la Arquitectura, con la ciudad, con la Facultad, con la Universidad, con el país.
Entre aquellos compañeros, además de Parodi, estaban José Miguel Aroztegui (gran profesor, excelente investigador y científico en el campo del Acondicionamiento Natural, impulsor de Arquisur –el premio para estudiantes lleva su nombre- y muy buen proyectista), el “Pacho” Nalerio que venía de Francia y de Angola, El “Pera” Margenat llegado desde Venezuela, y muchos jóvenes profesionales y estudiantes, casi todos éramos menores de 30 años. Construimos un Taller, en el que los estudiantes ocuparon el lugar central. Por allí pasaron muchos profes que hoy ya no están en la docencia, como el Canario Saravia, el Manso Lebrato, Alina del Castillo, Alicia Artigas, Raúl Vallés, Ricky Supparo, Roberto Langwagen, Jorge Durán, y muchos más que injustamente no incluyo en esta lista para no hacerla muy larga.
El trayecto entre 1985 y 2000 atravesó crisis y momentos de euforia, el Taller fue un protagonista de una Facultad en reconstrucción y se reconstruyó permanentemente. Por sus salones pasaron cientos –quizás miles- de estudiantes, muchos de los cuales hoy son docentes en esta misma Facultad, en el Taller y en otros Talleres, y en otros lugares del planeta.
A partir de 2000 y con el alejamiento de Parodi, se inició el camino del Taller Schelotto, que hoy ya cumplió 15 años. En este renovado taller se incorporaron más compañeros y compañeras a los equipos docentes y se reavivaron las discusiones y las nuevas propuestas.
Al mirar el camino recorrido también están presentes los rostros de cientos de estudiantes, muchos de los cuales son hoy profesionales, y de decenas de profesores, ayudantes y colaboradores honorarios.
En esta mirada retrospectiva guardo un recuerdo especial para aquellos queridos compañeros y compañeras que perdimos: además de José Miguel, para Ricardo Muttoni, Luis Silvio Ferrario, Mabel Olivera y Beatriz Abdala.
A los que agrego dos grandes docentes de la Facultad que fallecieron este año: Inés Sanchez y Juan Carlos Vanini.
Y el recuerdo para los jóvenes estudiantes que fallecieron en un tremendo accidente de tránsito este mismo año.
Seguimos, trabajando, aprendiendo, compartiendo, mirando para adelante.
Los que hoy estamos en responsabilidades docentes habremos de dejar el paso a las generaciones que ya vienen, en el Taller y en la Facultad.
Lo mejor, es lo que está por venir.
La Arquitectura es un arma cargada de futuro.
Desde este lugar, y con el mayor de los le mando en nombre mío y el de todos los profesores y estudiantes un gran abrazo a Eduardo Ramos y a su compañera Matilde; Eduardo es un pilar de nuestra estructura docente; Eduardo está peleando por recuperar su salud desde hace más de un mes y va a salir adelante.
Arriba y un gran festejo esta noche!
Salvador Schelotto